Compartir lo Nuestro N°1
Compartir y comunicarnos
Cumplimos 50 años y queremos celebrarlo compartiendo con todos ustedes. Nada más oportuno que hacerlo a través de las páginas de esta revista cuya primera edición estamos presentando hoy, y que de ahora en más, no solo habrá de participar las novedades y actividades de Pollolin sino que será un espacio de comunicación para todos.
Estamos transitando el año de las Bodas de Oro de esta empresa y para llegar hasta aquí, recorrimos un largo camino de idas y vueltas; pero desde el comienzo nos guió un mismo objetivo: siempre de la mano de la gente y con la gente.
Hace 50 años o tal vez menos, había muchos criadores de pollos y huevos -eran más de cien-, algunos dispersos, otros asociados en cooperativas. Hoy quedan unos pocos productores de huevos y solamente un criador de pollos independiente. De hecho, somos la única empresa avícola más austral del mundo en incubación, cría y procesado de pollo.
Sin embargo, no es fácil desarrollar esta actividad aquí. Competir con los colegas del norte del país y de la Mesopotamia es muy arduo pues ellos cuentan con factores climáticos favorables y con la cercanía del puerto para su exportación, ventajas que no tenemos y que pudieron llevarnos a bajar los brazos.
No obstante, nos propusimos sortear las dificultades y, de ese modo, nos fijamos metas como la incorporación de estrategias que enriquecieron el proceso productivo. De ahí que innováramos poniendo en el mercado nuevos productos como los supercongelados precocidos y un mayor volumen en trozado y especialidades hasta lograr el 100 % de aprovechamiento de cada pieza.
Pero estos resultados no se consiguen sin el acompañamiento de personas valiosas que luchan a nuestro lado. Desde los primeros años me acompañó mi más fiel e incansable compañera Pascuala. Ella fue y sigue siendo el alma de nuestra familia tanto en el hogar como en la empresa. Es justo también mencionar a mis hijos, mis colaboradores más cercanos, en cuyas manos prácticamente descansa Pollolin. Ellos han demostrado saber conducir lo que con esfuerzo y trabajo emprendimos hace tantos años.
Quiero brindar un agradecimiento muy especial a todos los hombres y mujeres que trabajaron y trabajan junto a nosotros; a clientes, proveedores, asesores externos, familiares, amigos y a todos los que desde los vínculos laborales y comerciales hasta los del afecto y el apoyo ayudaron a construir Pollolin. Los incluimos y participamos en esta celebración.
Hoy me siento satisfecho porque finalmente se pudo lograr, aunque el camino a veces sea tan difícil para este rubro en la empresa argentina.
Roberto Maionchi
Gerente General